BUENOS AIRES.- La presentación del mentalista español Javier Botia en el programa de Marcelo Tinelli generó una gran expectativa, que se fue diluyendo con el paso de los minutos. Lejos de causar admiración y asombro, el show terminó entre carcajadas y burlas por un truco que salió mal.

En realidad, su actuación comenzó bien, con una demostración increíble. El mentalista logró doblar dos cucharas sin usar la fuerza física, y se ganó una merecida ovación.

Luego fue por más, pero las cosas no salieron como esperaba. El español entregó al jurado tres bolitas blancas y una negra. Él no vio cuál le tocaba a cada uno y les pidió que intenten engañarlo asegurando que, de todos modos, podría darse cuenta por lectura del lenguaje corporal si le decían la verdad o no.

De entrada, Botia descartó a Graciela Alfano y a Moria Casán, por lo que su decisión quedó entre Polino y Solita. Para confundirlo, ambos afirmaron que tenían la bolita negra. El mentalista se inclinó por Solita y se llevó una sorpresa: el periodista era quien en realidad tenía la bolita negra.

Las risas estallaron de inmediato, y aparecieron las primeras burlas para el europeo. “Soy gallego, ¿qué querés?”, se justificó intentando matizar el incómodo momento con buen humor.